Soy muy exquisito para la comida, en mi casa siempre se ha comido increíblemente bien, carnes ibéricas, mariscos frescos y guisos caseros entre otras muchas cosas. En los hogares de bien no se cocina, se guisa. Pero ser un sibarita en la mesa no quiere decir que no disfrute con un buen bocadillo, pizza o hamburguesa.
Suelo ir poco a McDonald's, una vez cada tres meses más o menos, creo que cuatro o cinco visitas al año a McDonald's no es excesivo. Me encanta McDonald's. Disfruto mucho en sus restaurantes.
Ayer me comí un menú grande BigMac con patatas normales y Coca-Cola Zero, también probé medio Cuarto de Libra que compartí. Todo muy bueno, pero hoy no voy a hablar de las hamburguesas sino de algo que suele estar en segundo plano pero no por ello es menos importante. La salsa ketchup.
Supongo que estaréis al tanto de ello pero hace unos tres años Heinz dejó de fabricar ketchup para McDonald's coincidiendo con el nombramiento de un nuevo director ejecutivo, Bernardo Hess, casualmente expresidente ejecutivo de Burger King. Todo son suposiciones porque Heinz no ha hecho ninguna declaración al respecto debido a su política con los clientes.
McDonald's por su parte se ha limitado a decir que este cambio es otro paso más en su nueva política de utilizar productos autóctonos dentro de cada país. El caso es que tras 40 años de suministro ya no encontraremos ketchup Heinz en McDonald's. Pero no vengo a lamentarme, ni mucho menos, todo lo contrario. Ayer estuve degustando con atención el sabor del nuevo ketchup y me parece una genialidad de producto, si cabe mejor que el anterior.
¿Quién es el encargado de fabricar el ketchup de McDonald's España? Pues una empresa que sabe mucho de salsas de tomate, HELIOS. No solo me sorprendió el sabor, también el envase ha mejorado, es mucho más fácil de abrir y servir.
Yo nunca le echo ketchup al BigMac pero sí lo utilizo para mojar las patatas fritas.