Lo que hice la primera vez que pisé internet fue abrir el navegador web, por supuesto Internet Explorer, la verdad es que no recuerdo bien qué página visité, por aquel entonces tenía en casa un suplemento dominical del periódico ABC en el que se hablaba de esa cosa de internet y te mostraba la primera lista de páginas web que vi en mi vida. En esa lista había sobre todo direcciones gubernamentales como la de la Casa Blanca, pero al final del reportaje había un recuadro con algunas webs para adultos, por supuesto la primera dirección era la de Playboy. Que por aquel entonces tenían este aspecto:
www.whitehouse.gov (15 de febrero de 1998) |
www.playboy.com (4 de julio de 1997) |
El primer mes de internet lo recuerdo bajo un estrés infernal ya que me dio por pensar que las direcciones que había visitado podrían venir reflejadas en la factura de telefónica. Ahora que lo pienso podría haberme esperado el primer mes sin meterme en nada porno para comprobar tranquilamente si las páginas web venían o no en la factura, pero así es la vida. Cuando comprobé que las facturas venían limpias de polvo y paja, el ordenador se convirtió oficialmente en mi principal fuente para el desahogo personal.
Así que puedo decir que lo primero que pisé de internet, supongo que casi como todo el mundo, fue una página web, aunque muy poco después se produciría la primera revolución. Sin duda una de los puntos de inflexión más importantes de internet vino de la mano del IRC (Internet Relay Chat), por supuesto con su cliente más famoso, el mIRC. El mIRC marcó la que posiblemente sea la época más maravillosa de toda la historia de internet. Todo era nuevo, cualquier cosa nos fascinaba y además concentraba la esencia del internet primigenio, que es interactuar con verdaderos desconocidos. Me gustaría hacer un inciso en esto último para que reflexiones sobre eso que llamo esencia de internet. Todos eran verdaderos desconocidos y aunque en las conversaciones del canal podía participar cualquiera, lo normal era entablar conversaciones privadas.
La época del IRC podemos subdividirla en varios acontecimientos que de alguna forma cambiaron nuestro comportamiento dentro del chat. Para mí el IRC tuvo tres épocas bien diferenciadas, la primera fue la del mIRC sin ningún aditivo cuyo nacimiento fue el 28 de febrero de 1995, la segunda la de los scripts y la tercera la del fserve.
Los scripts eran programas que añadían nuevas funciones en un entorno gráfico nuevo, básicamente eran cambios de skins cargados de add-ons. Los scripts popularizaron los ataques entre usuarios, de hecho la época de los scripts la podríamos llamar también época de la ciberguerra. Los ataques se conocían como nukes, se usaban exploits, floods y troyanos. Los dos troyanos más importantes para mí fueron BackOrifice lanzado el 3 de agosto de 1998 y Sub7 (NetBus).
www.cultdeadcow.com (6 de diciembre de 1998) |
Se me saltan las lágrimas al ver estos legajos de internet. Personalmente a los troyanos le debo todo lo que aprendí sobre redes en aquella época, surfeo de puertos, protocolo TCP/IP, explotis, telnet, routers... Hubo grandes scripts, yo los que más usé fueron IRCap, X-Cript, 7thSphere, Orbital y por último Mesías.
En mi última etapa de IRC recuerdo que me pegaba todo el día haciendo fserve para bajar música de todo tipo, posiblemente el fserve sea lo menos conocido para el público en general. El fserve fue una revolución en el IRC y por consiguiente en internet. Era un sistema que te permitía navegar por los directorios de una máquina servidor y bajar sus archivos. Los fserve tenían sus propias reglas, podías bajar según los créditos que tuvieras y esos créditos se conseguían subiendo material de tu ordenador al servidor. Obviamente el 90% de fserve que se montaban eran para intercambiar pornografía, que ni que decir tiene las barbaridades que uno tenía que ver aún sin querer ya que la única información que tenías de la fotografía o vídeo que ibas a bajarte era simplemente el nombre que el fulando del fserve le había puesto al archivo y el directorio en el que se alojaba, que básicamente era un thumbnail pero sin fotos.
Soy un romántico del IRC y podría hablar horas sobre este tema, pero creo que con esto ya he citado lo más reseñable de la época del IRC, aunque algo que siempre me gusta preguntar a los románticos del IRC es si prefieren el IRC de Undernet o el posterior de IRC-Hispano.
www.altavista.com (2 de marzo de 1999) |
Después del año 2000 parecía que todo estaba inventado, todo el mundo tenía su correo de hotmail, las búsquedas se hacían en altavista y olé pero el 23 de septiembre de 2002 un zorro en llamas conocido como FireFox cambió nuestra forma de navegar por internet gracias a la multipestaña. Realmente las pestañas de navegación ya se habían inventado mucho antes, el mismo navegador anterior de Mozilla, la versión 4.0 de Opera lanzada en 2000 e inclusive el antiquísimo navegador Netcaptor ya las tenía en 1997. Pero fue FireFox el primero que consiguió una migración importante de usuarios de Internet Explorer, de hecho lo recuerdo como un éxodo, lo moderno era decir Mocosoft en vez de Microsoft (al igual que Timofónica) y hablar mal de Windows, cosa que nunca entendí la verdad.
En esa misma época hubo otro gran punto de inflexión que agravó el éxodo de los productos de Microsoft, la gente no sólo tenía un nuevo navegador sino que además ya podíamos escuchar música y ver vídeos con otro programa que no fuera el Windows Media Player. Me estoy refiriendo a WinAmp y VLC. La fecha de lanzamiento oficial de VLC fue el 1 de febrero de 2001 y quiero recalcar esta fecha como un momento histórico en internet porque gracias a VLC dejamos de instalar el maldito Codec Pack Elisoft, que era una amalgama de codecs necesarios para ver y oír cualquier cosa en el ordenador que siempre tuvo la leyenda negra de que estaba plagado de virus.
A toda esta época posterior a la fiebre del IRC podríamos llamarla Éxodo de Microsoft en el que navegadores y software en general eran presentados como la salvación.
Tras el IRC y el Éxodo de Microsoft vino la tercera y última época antes de la llegada del ADSL, fue la época del pirateo. El pirateo primigenio era muy distinto al pirateo de ahora. Hoy todo se piratea desde internet, antes no, de hecho sólo utilizábamos internet para conseguir lo que llamábamos parche o crack, que no era otra cosa que el programita que hacía que nuestras copias físicas en CD cobrasen vida como por arte de magia.
Yo fui el primero en mi barrio (y posiblemente en mi ciudad) que se compró una grabadora de CD (las llamábamos tostadoras), creo que después de Bill Gates yo he sido uno de los que más dinero le ha sacado a Windows 98. La grabadora que me compré fue la Hewlett Packard Cd-Writer 8100 Plus, me costó 67.000 pesétas. Al poco tiempo me compraría el modelo superior 9100 que grababa mucho más rápido. Fue una época en la que pasaba más tiempo con el Nero Burning ROM que con mi familia.
Tras estas tres grandes épocas que podemos englobar en el internet de los módems llegaría uno de los acontecimientos más importantes en la historia de la humanidad, el ADSL. No hago mención al RDSI porque aquello fue un visto y no visto. El ADSL desterró de nuestras vidas el ahora entrañable ruidito que hacían los módem-fax al conectarse. Ya no teníamos que meternos en internet de seis de la tarde a ocho de la mañana (que era la franja horaria en la que podías conectarte sin temor a la factura), gracias al ADSL supimos lo que era pajearnos navegar por internet al despertarnos de la cama.
El ADSL no sólo cambió radicalmente nuestras vidas y la de nuestros ordenadores, recuerdo que un año tuve encendido mi ordenador desde junio hasta finales de agosto de forma ininterrumpida, es decir que durante esos tres meses no apagué el ordenador ni si quiera para reiniciarlo. Es una verdadera lástima que perdiera todos los pantallazos de aquella época en 2005, aquello fue un desastre, me compré un nuevo disco duro, si no recuerdo mal estaba cambiando el que tenía de 2Gb por otro de 20Gb, estábamos mi hermano pequeño y yo ilusionados, con el ordenador abierto y toda la habitación llena de cachivaches cuando en un descuido el disco duro de 2Gb que tórpemente había dejado encima de la carcasa del ordenador, con un movimiento involuntario se nos cayó al suelo con la mala suerte de que se rompió, al volverlo a colocar sólo hacía unos chasquidos y nada pudimos salvar.
Salvo archivos personal que perdimos de porvida, todo lo demás no tardaríamos en recuperarlo gracias al ADSL y las redes P2P que se multiplicaron como champiñones, eDonkey, eMule, Napster, Kazaa, Shareaza, Overnet, LimeWire, BearShare, Ares Galaxy, iMesh, Gnutella o el magnífico Audiogalaxy que comenzó usando redes ftp y tenía de todo. Yo describo la época P2P como ese tiempo en el que podíamos entrar en un supermercado y llevarnos todo lo que quisiéramos sin pagar. Sin duda una época llena de gozo.
Cierto es que aunque esté hablando de épocas diferentes no quiere decir que sean períodos separados, de hecho estas épocas se solapan con frecuencia, como es el caso de la época social. La época de lo social es posiblemente la más convulsa de todas ya que hay dos partes bien diferenciadas y que nada tienen que ver la una con la otra. Yo siempre he visto la época social como la del IRC pero con amigos, es decir, hubo un momento en internet en el que dejamos de hablar con desconocidos para hacerlo con las personas de nuestro entorno. Las dos partes en que divido lo social son la primera etapa de software y la segunda de web. Me explico. La primera etapa social se basó en el software, concretamente en el programa Microsoft Messenger que tiene un tiempo bien definido entre 1999 y 2005. La segunda fase comenzó justo después del cierre de Messenger con la expansión de facebook, es la que llamo época social de web, que es precisamente en la que aún nos encontramos y que para mí es sin duda la peor de todas.
A veces he pensado que la culpa de que la época social sea la peor de todas no la tiene facebook sino el uso generalizado de internet provocado por la expansión masiva de teléfonos móviles. Hubo un tiempo en el que facebook era divertido, en esencia era como messenger pero con más posibilidades. Fue una mejoría cualitativa hasta que desembarcaron esas personas que se reían de ti en el año 1998 porque hablabas con gente en el mIRC. Esos mismos que preferían salir a emborracharse y hacían el ridículo cada fin de semana en las discotecas son los que ahora suben cincuenta fotos al día de sus hijos haciendo el ganso, de su gorda mujer recién levantada, bebiéndose un gintonic en una terracita de mierda o dando vergüenza ajena con orejas de perro.
Aunque si tuviera que definir la época actual, la que estamos viviendo a día de hoy, diría que es la época del resurgir y es que desde que cerré todas mis redes sociales, todo en internet ha adquirido una nueva dimensión. Mi tiempo es mucho más productivo, escucho más y mejor música y el tema de los downlodas vuelve a tener sentido con los nuevos trackers que aunque llevan ya años entre nosotros son cada vez más populares. Y por supuesto no podía dejar pasar por alto el resurgir de los foros, que han existido prácticamente desde que existe internet pero es ahora cuando los estoy conociendo.
Qué duda cabe que hay muchísimas cosas más que no he mencionado, como la fiebre del blog, la caída de gigantes como Encarta, los juegos en red, la evolución del porno de la que ya me habéis leído en alguna ocasión, youtube y sus youtubers, las aplicaciones "democratizantes" como milanuncios, airbnb o uber, la generación tinder, las sextuiteras... internet tiene muchas historias.