Imagínate que uno de esos subnormales que hacen pintadas con un rotulador en los aseos de los centros comerciales, hiciera lo mismo sobre el Éxtasis de la beata Ludovica Albertoni de Bernini. Pues eso es lo que he sentido cuando he visto el destrozo que esta mujer se ha hecho en la espalda:
(Este culo es una obra de arte)