España se ha comido un nardo en Eurovisión. El resultado es absurdo, no tiene sentido que hayamos quedado por debajo de Estonia, aunque este resultado tan inverosímil lo que hace es confirmar que Eurovisión ya no es que no tenga nada que ver con la música, esto ya lo sabíamos todos, sino que es una herramienta más de sucia manipulación. Todo lo que toca la política se convierte en basura.
¿Qué lectura sacamos de todo este dislate? ¿El empoderamiento de la mujer ya no interesa? ¿Ahora lo que importa es ser no binario y borrar la identidad sexual por completo? ¿Israel controla los hilos de Europa y nos ha humillado por lo que Perro Sanxe está haciendo con Palestina? Muchas preguntas cuyas respuestas no me interesan lo más mínimo. Para mí Zorra siempre será sin duda uno de los mejores temas que España ha llevado a Eurovisión.
Por cierto, otro temazo menospreciado ha sido el de Finlandia.