Siempre que se habla de cine español en general, hay un género al que se le tiene marginado por completo, de hecho para muchos es el peor valorado de todos y es motivo de burla y mofa. Me estoy refiriendo a la corriente cinematográfica conocida como el destape.
Siempre he pensado que las personas que critican el cine del destape lo hacen para parecer entendidos de cine. Se apuntan a la moda de despreciar lo antiguo porque quieren parecer superiores, como cuando critican los peinados con laca, las hombreras o las cintas de cassette. Estúpidos superficiales incapaces de descifrar el valor que oculta la banalidad.
Hay varias razones por las que considero que el cine del destape no sólo es bueno, sino que es el mejor de la historia de España, pero para eso tenemos que desestacionalizarlo, igual que se hace en estadística con los datos económicos. Por ejemplo, los datos del paro del trimestre estival son considerablemente mejores al trimestre que lo precede, pero esa mejoría hay que desestacionalizarla, que no es más que eliminar la mejoría que se le presume inherente a dicho período, para obtener como resultado lo que podríamos llamar desviación real.
Pues con el cine pasa algo parecido, todos valoran el destape como si el mismo fenómeno ocurriese hoy mismo, es como si criticásemos un quinqué (lámpara de petróleo) pensando en cómo sería su uso actual, sólo a un imbécil podría ocurrírsele tal cosa. Un quinqué es un artilugio maravilloso y siempre lo será, porque la lógica nos lo hace juzgar enmarcado en un período determinado de tiempo que somos capaces de desestacionalizar. Pues este sencillo ejercicio es el que debemos hacer cuando nos refiramos a la gran época dorada del destape español.
Seguro que ya lo has empezado a ver de manera distinta y para continuar con mi teoría voy a concretar cinco puntos por los que considero que el cine del destape es arte retro español en su estado máximo.
Si desestacionalizamos los datos, el destape es el mejor cine de toda la historia de España.
Agítese antes de usarla es otro clásico de Mariano Ozores. En esta película de 1983 Fernando Esteso, Andrés Pajares, Antonio Ozores y Juanito Navarro entre otros, forman parte del equipo médico de un hospital de la Costa del Sol donde a las enfermeras se les contrata no por su profesionalidad sino por sus atributos físicos, todo mezclado con estafadores, evasión fiscal y tetas, muchas tetas.
En Agítese antes de usarla también sale Nadine Rochex
Si algo bueno tiene Al este del oeste, película de Mariano Ozores de 1984, es que junta a Adriana Vega y África Pratt en la misma película. Es el western por excelencia del Destape y en mi opinión hay demasiados tiros y pocas tetas. Fernando Esteso es una parodia del forastero de las películas americanas y sólo por ver a África Pratt vestida de cabaretera, vale la pena.
El western por excelencia del Destape